El aye-aye (Daubentonia madagascarensis, antes Chiromys madagascarensis). Puede que a primera vista estos extraños animales no parezcan primates, pero están emparentados con chimpancés, simios y humanos. Su estrafalaria apariencia hace que se le considere el principal responsable del origen de la palabra "lémur", que quiere decir en latín «espíritu nocturno». El aye-aye es el único representante vivo de su género (Daubentonia), familia (Daubentonidae) e infraorden (Chiromyiformes).