Muchas de las características de este animal, recuerdan a los primates aunque en realidad, el kinkajú está emparentado con el mapache. Y viven en las selvas tropicales de Centroamérica y América del Sur.
Pasan la mayor parte del tiempo en los árboles. Pueden poner sus pies al revés y correr fácilmente en cualquier dirección sobre las ramas o subir y bajar por los troncos de los árboles. Tienen una cola prensil que utilizan como si fuera otro brazo.
Utilizan su delgada y larga lengua para sorber la miel de las colmenas y también para deshacerse de insectos como las termitas. También se alimentan de frutas y pequeños mamíferos que atrapan con sus hábiles y fuertes patas. Suelen ser activos por la noche.
Forman grupos en las copas de los árboles y realizan actividades sociales, como acicalarse. No es fácil verlos, aunque sí oírlos.
Las hembras tienen una cría en verano o primavera. Ésta nace con los ojos cerrados y no puede ver durante un mes. Sin embargo, se desarrolla con rapidez y a finales del segundo mes está lista para caminar y guindarse sola.