Son animales muy ágiles, lo que les permite poder trasladarse dando pequeños saltos entre las rocas de las zonas donde habitan.
Cabe destacar que según la especie de cabra, variará la agilidad que tenga.
Domesticadas se crían para extraer su leche, por el poder nutritivo de la misma, y también para poder comer su carne, se utiliza su piel como cuero y su pelaje para fabricar alfombras. Son animales atractivos para pequeños y grandes, afectuosos, pacientes, fáciles de alimentar y manejar.