1- Recoger los excrementos
Este es uno de los aspectos más importantes y básicos para una tenencia de perros responsable. Siempre debemos recoger los excrementos de nuestro perro.
Por otro lado es muy recomendable fijarnos donde nuestro perro hace “popó”. Es posible que se trate de un jardín privado y al dueño no le haga mucha gracia, aunque después lo recojamos.
Cuando recojamos los excrementos lo deberemos de hacer con una bolsa que luego cerraremos bien y depositaremos en cualquier papelera o contenedor de basura.
2- Vigila los ladridos.
Los perros ladran por muchas razones, pero es responsabilidad nuestra controlar su ladrido como parte muy importante de una tenencia responsable.
Si dejas a tu perro solo en casa es muy recomendable preguntar a los vecinos si ladra cuando se queda solo. Así evitaremos denuncias y problemas con ellos.
Si tu perro ladra en exceso cuando lo dejas solo o sufre ansiedad por separación consulta con un profesional para poner remedio lo antes posible a este comportamiento.
3- Educa a tu perro
Sabemos que quieres a tu perro como un miembro más de la familia, pero quererlo no significa que pueda hacer lo que quiera. Los perros deben tener reglas y límites. En casa y fuera de ella.
Nuestro perro no debe saltar sobre las personas, debe ser respetuoso con las visitas… en definitiva, debe ser educado con las personas. Si nuestro perro se sobreexcita con las visitas debemos hacerlo sentar y premiarlo cuando esté tranquilo. Si le gusta jugar con sus juguetes, enséñale a coger un juguete con la boca. Los perros que tienen algo en la boca tienden a saltar menos.