Un perro suelto en un carro puede convertirse en una gran distracción y provocar un accidente de tráfico.
Arnés de Seguridad:
Es una correa que se engancha al arnés del perro y al broche del cinturón. Es la opción más económica, pero tiene dos inconvenientes:
No hay modelos para razas pequeñas y a gran velocidad, el impacto del perro con el asiento delantero puede llegar a superar los 600 kg.
Redes:
La red debe abarcar desde el techo del carro hasta el suelo del maletero. Intenta que la red no sea elástica, pues no retendría a la mascota en caso de impacto.
Barras Separadoras:
Es un entramado de barras horizontales y verticales. Son muy fáciles de colocar, pero en ocasiones no aguantan el empuje de un perro grande.
Barreras a Medida:
Son unas rejillas metálicas hechas a medida para cada modelo de vehículo. Son ideales para retener cualquier tipo de carga, ya sea una mascota u otro tipo de mercancía.
Transportines:
Una opción económica y de fácil uso, ya que se puede atar al cinturón de seguridad y evita la movilidad del perro.